Lamprene se usa para tratar la lepra, la enfermedad de Hansen.
Uso común
Lamprene se utiliza para tratar la lepra, también conocida como enfermedad de Hansen. Su principio activo es clofazimina. En muchos casos se administra junto con otros medicamentos específicos para la lepra, y puede combinarse con un fármaco similar a la cortisona cuando se presentan brotes inflamatorios asociados a la enfermedad.
Dosis y modo de uso
Toma Lamprene con alimentos o con leche para mejorar su tolerancia digestiva. Es fundamental continuar el tratamiento incluso si comienzas a sentirte mejor, ya que la terapia puede prolongarse hasta 2 años.
Dosis orientativa para la lepra:
Adultos y adolescentes: 50 a 100 mg una vez al día. Siempre se utiliza en combinación con otros medicamentos específicos para la enfermedad de Hansen.
Niños: la dosis debe ser determinada por el médico.
Precauciones
Antes de iniciar el tratamiento, informa a tu médico si:
estás embarazada, planeas estarlo o estás amamantando,
tomas algún medicamento (recetado o no), productos herbales o suplementos,
tienes alergias a alimentos, fármacos o sustancias.
Lamprene puede causar mareos o somnolencia, por lo que debes evitar conducir, usar maquinaria o realizar actividades que requieran alerta hasta saber cómo te afecta.
Uno de los efectos característicos es la decoloración de la piel, que puede volverse rosada, rojiza o incluso marrón-negra tras unas semanas de uso. Además, aumenta la sensibilidad al sol, pudiendo provocar picor, erupciones, enrojecimiento o incluso quemaduras solares. Evita la exposición directa al sol y utiliza ropa protectora, sombrero, gafas de sol y protector solar.
Contraindicaciones
Informa a tu médico especialmente si padeces:
enfermedad hepática, ya que la clofazimina puede causar hepatitis o daño hepático;
trastornos estomacales o intestinales, dado que puede provocar molestias gastrointestinales y, en casos poco frecuentes, dolor abdominal intenso o quemazón, que requieren atención médica.
Posibles efectos secundarios
Efectos frecuentes:
diarrea,
piel seca, áspera o descamativa,
pérdida de apetito,
náuseas o vómitos,
decoloración rosada, roja o marrón-negra de la piel y ojos,
erupciones cutáneas y picor.
Menos frecuentes:
cambios en el gusto,
sequedad u irritación ocular,
mayor sensibilidad a la luz solar.
Efectos raros (requieren atención médica):
heces negras o con sangre,
dolor abdominal intenso o tipo cólico,
depresión,
coloración amarilla (o anaranjada) de ojos o piel.
Si aparece cualquier síntoma preocupante, consulta a tu médico de inmediato.
Interacciones
Informa a tu médico si utilizas:
hidróxido de aluminio,
hidróxido de magnesio,
fenitoína.
Estos fármacos pueden interferir con la acción de Lamprene o modificar su absorción.
Dosis olvidada
Si olvidas una dosis, tómala en cuanto lo recuerdes. Si ya casi corresponde la siguiente, omite la dosis olvidada y retoma tu horario habitual. No tomes dosis dobles.
Sobredosis
Si sospechas una sobredosis, busca atención médica urgente.
Conservación
Guarda Lamprene en su envase cerrado, a temperatura ambiente, lejos de la humedad, el calor y la luz directa. No congelar. Mantener fuera del alcance de los niños.
Aviso importante
La información anterior es de carácter general y no sustituye las indicaciones personalizadas de un médico. No utilices este contenido para autodiagnóstico o automedicación. Consulta siempre con tu profesional sanitario para obtener recomendaciones adecuadas. No asumimos responsabilidad por un uso incorrecto o interpretación de la información.





