La azitromicina es un antibiótico ampliamente utilizado para tratar diversas infecciones bacterianas como bronquitis, infecciones de la piel y ETS. Funciona impidiendo el crecimiento de bacterias y, por lo general, se toma una vez al día.
Uso común
Mira, tita, Azitromicina es un antibiótico del grupo de los macrólidos que usamos para tratar infecciones bacterianas muy variadas: de las vías respiratorias, de la piel, de los oídos e incluso algunas infecciones de transmisión sexual. Funciona bloqueando la producción de proteínas de las bacterias, así que deja de crecer la infección. Solemos recetarla en casos de bronquitis, neumonía, sinusitis, faringitis, infecciones cutáneas y clamidia. Eso sí, tita: no sirve contra virus, así que no ayuda con resfriados o gripe.
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Dosis y modo de uso
La azitromicina normalmente se toma una vez al día, con o sin comida. A veces el médico receta una dosis única grande, y otras veces un tratamiento corto de varios días, depende de la infección.
Traga las tabletas enteras con un vaso de agua. Muy importante, tita: termina todo el tratamiento, aunque ya te sientas mejor antes.
Precauciones
Antes de usarla, avisa al médico si tienes:
enfermedad del hígado o riñones,
miastenia gravis,
problemas del ritmo cardíaco.
Hay que tener cuidado si tomas otros medicamentos que puedan afectar el ritmo del corazón. Los tratamientos largos o repetidos pueden provocar infecciones secundarias, como crecimiento de hongos. Si los síntomas no mejoran o empeoran, coméntalo con tu médico.
Contraindicaciones
No debes tomar azitromicina si:
eres alérgica a la azitromicina, eritromicina u otros macrólidos,
has tenido ictericia colestásica o problemas hepáticos con este medicamento antes.
Se usa con precaución en personas con prolongación del QT o desequilibrios de electrolitos.
Posibles efectos secundarios
Los más comunes son:
diarrea,
náuseas,
dolor abdominal,
vómitos.
También puede aparecer:
dolor de cabeza, mareos,
sarpullido leve.
Raros pero graves:
problemas del hígado,
reacciones alérgicas fuertes,
alteraciones del ritmo cardíaco.
Si notas color amarillo en la piel/ojos, cansancio extremo o palpitaciones, busca atención médica.
Interacciones
La azitromicina puede interactuar con:
antiácidos con aluminio o magnesio,
anticoagulantes como warfarina,
medicamentos que afectan el ritmo del corazón.
Si estás tomando fármacos que prolongan el intervalo QT, coméntalo con tu médico. Algunas medicinas pueden necesitar control extra durante el tratamiento.
Dosis olvidada
Si olvidaste una dosis, tómala cuando lo recuerdes — a menos que ya casi toque la siguiente. No tomes doble cantidad. Intenta tomarla siempre a la misma hora.
Sobredosis
Una sobredosis puede causar:
náuseas, vómitos, diarrea,
pérdida temporal de la audición.
En casos serios puede requerirse hospitalización. Si sospechas una sobredosis, busca ayuda médica urgentemente.
Conservación
Guarda la azitromicina a temperatura ambiente, lejos de la humedad y el calor. Déjala en su envase original y fuera del alcance de niños y mascotas. No uses el medicamento caducado.
Aviso importante
Tita, aquí tienes una guía general para orientarte, pero las indicaciones exactas siempre deben venir de tu médico. Nada de automedicación con antibióticos.





