La ciprofloxacina es un antibiótico de fluoroquinolona de amplio espectro que se usa para tratar diversas infecciones bacterianas, incluidas las del tracto respiratorio, el tracto urinario, la piel y el sistema gastrointestinal. Funciona inhibiendo la replicación bacteriana del ADN. Los efectos secundarios comunes incluyen náuseas, diarrea y mareos. Debe usarse con precaución debido a riesgos potenciales como ruptura de tendones y daño a los nervios.
Uso habitual
El ciprofloxacino es un antibiótico de amplio espectro perteneciente a la familia de las fluoroquinolonas. Se usa para tratar infecciones bacterianas de muchos tipos, entre ellas:
Infecciones urinarias
Infecciones respiratorias
Infecciones gastrointestinales
Infecciones de piel y tejidos blandos
Infecciones óseas
Infecciones por bacterias como Salmonella, Shigella, Proteus, Chlamydia, Streptococcus…
Este medicamento actúa bloqueando una enzima esencial para que las bacterias se reproduzcan. No sirve para virus, así que no ayuda con la gripe, catarros o resfriados.
Dosis y modo de uso
La dosis puede variar según la infección, pero generalmente:
250 mg a 750 mg,
dos veces al día,
por vía oral o intravenosa, según la gravedad.
Tómalo con un vaso grande de agua, y muy importante:
👉 No lo tomes junto con antiácidos ni suplementos con calcio, magnesio o hierro. Déjales un margen de 2 horas antes o después.
Y ya sabes, tía: hay que completar todo el tratamiento, aunque te sientas bien antes.
Precauciones
Antes de empezar, dile a tu médico si tienes:
Problemas de tendones o antecedentes de roturas
Enfermedad renal
Antecedentes de convulsiones
Alergia a otros antibióticos del mismo grupo
Evita tomar el sol mucho rato porque este medicamento te puede volver más fotosensible.
Puede causar mareo, así que mejor no conducir si notas la cabeza rara, ¿vale?
Las personas mayores, especialmente quienes toman corticoides, deben usarlo con más vigilancia.
Contraindicaciones
No debes usar ciprofloxacino si:
Eres alérgica/o a las fluoroquinolonas
Eres menor de edad (salvo casos muy específicos)
Estás embarazada o amamantando, salvo que tu médico diga que es absolutamente necesario
Estás tomando tizanidina (la combinación está totalmente prohibida)
Posibles efectos secundarios
Algunos son comunes y suelen ser leves:
Náuseas
Diarrea
Dolor de cabeza
Mareos
Sabor metálico
Pero también existen, aunque son raros, otros más serios:
Dolor o inflamación de los tendones
Cambios de humor
Neuropatías (hormigueo o dolor nervioso)
Reacciones alérgicas
Si notas dolor fuerte en un tendón, palpitaciones, erupciones o dificultad para respirar, contacta con un médico.
Interacciones
Puede interactuar con:
Antiácidos y suplementos minerales
Anticoagulantes como warfarina
Medicación antiarrítmica
Antidepresivos
Tizanidina (prohibida, insisto)
Evita los lácteos junto con la dosis, porque reducen su absorción.
Dosis olvidada
Si se te olvida:
Tómala cuando lo recuerdes
Si ya casi toca la siguiente, sáltala
No dobles dosis
No lo suspendas antes de tiempo
Esto ayuda a evitar resistencias bacterianas.
Sobredosis
Puede causar:
Mareos fuertes
Náuseas
Confusión
Convulsiones
Problemas renales
Busca atención médica inmediata si ocurre.
Conservación
Guárdalo:
A temperatura ambiente
En su envase original
Lejos de humedad, calor y luz directa
Fuera del alcance de niños y mascotas
Recuerda, mi tía bonita…
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