El foslo es un mineral. Se utiliza para tratar la insuficiencia renal leve en la etapa tardía. Funciona reduciendo los niveles de fosfato.
Uso general
Tía querida, Phoslo es un medicamento de tipo mineral que se utiliza en personas con insuficiencia renal avanzada. Su función es ayudar a reducir los niveles altos de fosfato en el organismo, algo que suele ocurrir cuando los riñones ya no pueden filtrarlo correctamente.
El medicamento actúa uniéndose al fosfato que viene de los alimentos dentro del estómago e intestinos, evitando que pase a la sangre. Así se protege mejor el equilibrio del cuerpo cuando los riñones están fatigados.
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Cómo se usa (explicación general, sin indicar dosis)
Normalmente, tía, se toma junto con las comidas, porque así es como mejor puede atrapar el fosfato de los alimentos. Pero la cantidad exacta debe indicarla tu médico, según tus análisis y tu estado renal.
Precauciones
Antes de usarlo, es importante avisarle al médico si:
— estás embarazada, planeas estarlo o estás dando pecho, — tienes alergias a medicamentos o alimentos, — tienes problemas renales adicionales, — tus niveles de fosfato están bajos, — o cualquier otra condición médica relevante.
Contraindicaciones
Phoslo no se debe usar si:
— eres alérgica a alguno de sus componentes, — tienes niveles altos de calcio en la sangre, — estás tomando ciertos medicamentos para el corazón (como digitalis).
Posibles efectos secundarios
Efectos leves: — náuseas o malestar digestivo.
Efectos más serios (requieren atención médica): — reacciones alérgicas (erupción, hinchazón, dificultad para respirar), — cambios en el ritmo cardiaco, — confusión o alteraciones del estado de ánimo, — pérdida de apetito, — sed o micciones más frecuentes, — debilidad muscular, — vómitos persistentes, — cansancio fuera de lo habitual, — pérdida de conciencia.
Si notas algo de esto, tía, hay que avisar enseguida.
Interacciones
Es importante informar al médico sobre todos los medicamentos que tomas, incluidos suplementos.
Phoslo puede interferir con varios fármacos, entre ellos:
— algunos antibióticos, — hormonas tiroideas, — medicamentos para los huesos, — y ciertos tratamientos para el corazón.
Tu médico te indicará si debes separar tomas o ajustar horarios.
Si olvidas una toma
Si un día se te pasa, tía, simplemente tómalo cuando lo recuerdes, a menos que ya esté muy cerca la siguiente comida. No tomes doble cantidad. Vuelve a tu rutina normal sin preocuparte.
Sobredosis
Una cantidad excesiva puede causar:
— alteraciones del ritmo cardiaco, — pérdida de apetito, — estreñimiento, — confusión, — debilidad, — vómitos.
En ese caso, hay que buscar ayuda médica de inmediato.
Conservación
Guárdalo a temperatura ambiente, en un sitio fresco y seco, lejos de la humedad y del calor. Mantén el envase bien cerrado y lejos de niños y mascotas.
Aviso importante
Tía preciosa, esta información es orientativa. Cada persona con problemas renales necesita un plan muy personalizado.
